¿Quién fue Débora? La Historia de Débora en la Biblia

Débora fue una profetisa de Israel que tuvo la guía de Dios, fue la cuarta persona en desempeñar la función de Juez en Israel antes de la monarquía. Débora se destaca como la única mujer de Israel que asumió el rol de jueza.

Débora fue una de las mujeres más conocidas del Antiguo Testamento. El nombre «Débora» procede del hebreo Deborah, y significa «abeja». El importante papel que desempeñó en un momento complicado de la historia del pueblo de Israel la pone en el punto de mira.

Débora en la Biblia

Antes de hablar de quién era Débora, debemos saber que la Biblia menciona a dos mujeres con este nombre.

La primera aparece en Génesis, y fue la niñera de Rebeca que fue con ella a Canaán (Génesis 24:59). No tenemos muchos detalles sobre esta Débora, solo encontramos el registro de su muerte en Génesis 35:8.

La otra Débora es mucho más conocida, y su historia se recoge en el libro de los Jueces. Débora fue una profetisa que aparece en la lista de jueces de Israel y que vivió alrededor del año 1125 a.C.

Débora vivió en un periodo complicado de la historia de Israel, en el que la gente hacía lo que quería. En aquella época, el sacerdocio no funcionaba y tampoco había reyes gobernando al pueblo.

Una de las cosas que se pone de manifiesto en el relato de su historia es la debilidad y la cobardía que caracterizaban a los hombres de aquella época. Desde esta perspectiva, podemos decir que su ministerio fue una especie de protesta contra esta vergonzosa realidad.

Débora fue reconocida como profetisa porque tenía el don del Espíritu de Dios (Jueces 6:34; 11:29; 14:6).

El libro de los Jueces nos cuenta que Débora se sentaba bajo las palmeras, entre Rama y Betel, en las montañas de Efraín, y allí los israelitas de varias tribus la buscaban para que les solucionara sus problemas, es decir, Débora era la encargada de arbitrar las disputas de ese pueblo (Jueces 4:4).

Aunque Débora fue considerada una jueza ordinaria, es decir, de causas ordinarias y no militares, se destacó por ser la persona que pudo resolver el problema de la fragmentación de las tribus de Israel, reagrupándolas y llamándolas de nuevo a la fidelidad a Dios.

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Débora y Barac derrotaron a Sísara

Cuando fueron oprimidos por Sísara, capitán del ejército de Jabín, los israelitas recurrieron a Débora. Ella entonces se dirigió a Barak, para que dirigiera a los israelitas contra Sísara según la palabra del Señor. Pero Barak insistió en que solo iría a la batalla si Débora iba con él.

Ante esta situación, Débora aceptó acompañar a Barak, pero dejó claro que, debido a la forma cobarde en que actuó Barak, el honor de la victoria en la batalla no sería suyo, pues Dios entregaría a Sísara en manos de una mujer (Jueces 4:9).

El resultado del esfuerzo fue la aplastante victoria del pueblo de Israel sobre Sísara en la batalla de Cisón (Jueces. 4:15). De ahí que se reconozca a Débora como la persona que dirigió la liberación del pueblo de Israel de la opresión de Jabín, rey de los cananeos (Jueces 5).

Débora fue considerada la Madre de Israel

Débora era respetada en aquella época como «madre en Israel» (Jueces 5:7), y en Jueces 4:4 se nos dice que era la esposa de Lapidot.

Existe incluso una discusión entre los comentaristas judíos sobre la expresión «esposa de Lapidot», porque Lapidot significa literalmente «antorchas», por lo que algunos estudiosos entienden que dicha expresión es en realidad una descripción de Débora, y no una referencia a su marido.

Sin embargo, esta interpretación no es ampliamente aceptada por falta de pruebas que la respalden.

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¿Cómo se desarrolló la batalla en la que participó Débora?

El ejército de Jabín, dirigido por Sísara, era más poderoso que el ejército de Israel. Esto puede explicar, pero no justificar, la cobardía de Barak. Como ya hemos dicho, Débora acompañó a Barak en la batalla, y la victoria del pueblo de Israel se produjo por la intervención directa de Dios.

En el capítulo 5 de los Jueces, se nos informa de que una enorme tormenta desbordó el río Cisón y arrastró los carros de guerra de los cananeos (Jueces 5:21), dejando a su ejército completamente confundido, lo que les convirtió en presa fácil para los israelitas, que mataron a todos los soldados, de modo que no quedó ni un solo hombre en el bando enemigo (Jueces 4:16).

Sísara, ante el avance de los diez mil hombres dirigidos por Barak, bajó de su carro y huyó a pie. Buscó refugio en la tienda de Jael, esposa del ceneo Heber, pues había paz entre Jabín y el clan del ceneo Heber (Jueces 4:17).

La Biblia dice que Jael salió al encuentro de Sísara y lo invitó a su tienda prometiéndole protección. Sísara entonces le pidió a la mujer que si alguien le preguntaba si había alguien en su tienda, ella debía decir que no. Sísara permaneció escondido en la tienda de Jael, cubierto con un paño, hasta que, agotado, durmió un profundo sueño.

Aprovechando esta situación, Jael tomó una estaca y un martillo y se acercó a él en silencio, y luego le clavó la estaca en la sien, y murió (Jueces 4:21).

Cuando Barak pasó buscando a Sísara, Jael salió a su encuentro y le mostró al hombre muerto, cumpliendo exactamente lo que Débora había dicho, que una mujer se iba a encargar de matar al líder del ejército enemigo.

Después de esta batalla, los israelitas atacaron más y más a Jabín, y el rey cananeo fue completamente destruido por el ejército de Israel.

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¿Cuál es el cántico de Débora en la Biblia?

El canto de Débora se recoge en el libro de los Jueces (5:2-31) y básicamente celebra la victoria de Débora y Barak contra Sísara. Este canto es una de las piezas más antiguas de la literatura del Antiguo Testamento, y se conserva desde el siglo XII antes de Cristo.

El canto de Débora también es útil para entender un poco más sobre cómo funcionaban las relaciones tribales en Israel en aquella época.

Además, podemos decir que el cántico proporciona información muy importante sobre los detalles de cómo ocurrió la derrota de Sísara, complementando la narración del capítulo 4.

El cántico de Débpra puede tener la siguiente estructura:

• Comienzo de la alabanza (versículos 2,3).
• Invocación al Señor (versículos 4,5).
• Desolación bajo los opresores (versículos 6-8).
• La reunión de las tribus (versículos 9-18).
• La batalla en el río Cisón (versículos 19-23).
• La muerte de Sísara (versículos 24-27).
• La narración sobre la preocupación de la madre de Sísara (versículos 28-30).
• Resultado final (versículo 31).

Para profundizar más sobre la historia de Débora en la Biblia, te recomendamos el siguiente video.

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