¿Es pecado hacerse una cirugía plástica según la Biblia?

Para nadie es un secreto que la cirugía plástica abunda en latinoamérica y que a pesar del costo y los riesgos, las personas deciden hacerse este procedimiento, siendo México, Brasil y Colombia los países con mayor demanda.

Esta práctica común en el mundo, también se ha introducido en el ambiente cristiano, por esa razón, en el presente artículo vamos a reflexionar sobre los principios bíblicos acerca de la belleza y si someterse a una cirugía plastica es pecado o no.

Hacerse una cirugía plástica es un pecado cuando la motivación es solamente la vanidad. El creyente debe analizar sus verdaderos motivos y riesgos de hacerlo. Teniendo en cuenta que Dios sabe la verdadera intención del corazón.

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¿Las cirugías estéticas son pecado?

La Biblia no habla acerca de las cirugías estéticas, sin embargo, cuando un creyente tiene la intención de hacerse alguna operación o cirugía primero debe pedir la dirección de Dios y ver los principios bíblicos para hacer las cosas según la voluntad de Dios y no según su propia voluntad.

Lo primero que debe tener claro el creyente, sea hombre o mujer, es que nuestro cuerpo, es templo del Espíritu Santo (1 Corintios 6:19) y como dice el apóstol Pablo «Ustedes no son sus propios dueños», entonces antes de hacer cualquier cosa en nuestro cuerpo debemos tener temor de Dios.

Muchas personas se someten a cirugías estéticas por vanidad. Si esa es la motivación para hacerte una cirugía estética, dejame decirte que será un pecado, porque rechazas el diseño de Dios y quieres volverte como Dios, como lo hizo Eva al comer del fruto prohíbido (Génesis 3:5), al hacer tu cuerpo como tu quieres y no como el soberano Dios te diseñó.

La Biblia enseña que el cristiano debe honrar con su cuerpo a Dios, porque fuimos comprados por un precio, el precio que pagó Cristo en la cruz. «Fueron comprados por un precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios.» (1 Corintios 6:20), el deber del creyente es estar orgulloso del cuerpo que el Señor le ha dado.

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¿Qué piensa Dios de las operaciones?

Algo muy importante que podemos observar en las Sagradas Escrituras es que el Señor no dio mayor importancia a las cosas externas de nuestro cuerpo. Incluso el Padre, por medio de los profetas dio a conocer como iba a ser el aspecto físico del Mesías.

El aspecto físico de Jesús no es como el que nos ha presentado Hollywood, un hombre con ojos azules, cabello largo y guapo, por el contrario, el profeta Isaías profetizó del Señor: «No había en él belleza ni majestad alguna; su aspecto no era atractivo y nada en su apariencia lo hacía deseable.» (Isaías 53:2b).

De esta forma, el Padre celestial, decidió que el aspecto físico del Mesías no iba a ser lo primordial, porque el ser humano da prioridad a lo físico, a lo externo, pero el Señor mira es el corazón (1 Samuel 16:7).

Entonces, Dios no da mayor importancia a la forma física del ser humano. En cambio, el Señor a lo que da una verdadera importancia es al hombre interior (Efesios 3:16). El deseo y voluntad del Señor es nuestra santificación y esto hace parte de nuestro interior, no de las cosas exteriores (1 Tesalonicenses 4:3).

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¿Un cristiano se puede hacer una cirugía plástica?

Definitivamente, si la intención del cristiano es hacerse una cirugía plástica por vanidad, no debería hacerla.

Un creyente al intentar modificar su cuerpo (nariz, orejas, cachetes, parpados, senos etc.) entra en el pecado de vanidad y además peca contra Dios al no aceptarse tal y como Él lo creo.

De acuerdo a la BBC «el 85% de las personas que se someten a cirugía estética son mujeres.Y la mayoría lo hace por intentar atraer a los hombres». Esto es un claro llamado de atención a las hijas de Dios, ¿Cuál es el motivo de querer una cirugía Plástica?

La Biblia nos enseña que «engañoso es el encanto y pasajera la belleza» (Proverbios 31:30). Entonces, la mujer creyente, la cual tiene mas tendencia a realizarse cirugías plásticas, debe tener muy en cuenta que esa intención es vana y carnal y tiene que ver con una autoestima baja que no puede depender de la belleza de su cuerpo, la cual se va desgastando con el tiempo.

Según varios estudios epidemiológicos distintos, las mujeres que se operan tienen una tasa de suicidio que es dos o tres veces mayor que la del resto de la población. Lo cual implica que la cirugía plástica no resolverá tus problemas, sino que es el Señor el que nos debe llenar de todo vacío y problema que tenemos en nuestro interior.

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¿Cuándo un cristiano puede someterse a una cirugía plástica?

No todas las motivaciones para someterse a la cirugía plástica son erróneas o de pecado.

Si el creyente tiene un problema físico por un accidente o una patología que le impide hacer una vida normal, la cirugía plástica puede ser una opción.

Un cancer de mama, un rostro desfigurado por un accidente, quemaduras en el cuerpo, o cualquier tipo de situación relacionado con accidentes o patologías puede ser un buena situación para contemplar una cirugía plástica para recuperar la calidad de vida anterior, pero es importante analizar si es realmente conveniente (1 Corintios 10:23).

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¿Cuál es la verdadera intención de la cirugía plástica?

Someterse a una cirugía en sí no es un pecado. Pero la motivación que me hace querer hacerlo Sí. 

En la Biblia no encontrarás explícitamente: «No te harás cirugía plástica», como un mandamiento de Dios, pero la Biblia te hablará sobre la vanidad, la belleza, la modestia, la malicia, la idolatría y la forma de comportarse. 

Si tu verdadera intención, en caso de ser mujer, es convertirte en una mujer «más sexy», llamar la atención de otras personas, cambiar tu cuerpo porque lo odias, o cualquier otra razón vana, sí, estarás pecando. Y el mismo caso es para el hombre.

Antes de decidir realizarte una operación, mira dentro de ti, mira las intenciones reales, el corazón es engañoso, si hay un deseo de mostrar algo de más o creerte mas que alguien, olvidalo.

Define si tu intención refleja los consejos y ordenanzas del Señor o quieres hacer tu voluntad. Un creyente que realmente quiere agradar al Señor somete todos sus pensamientos y sentimientos a la obediencia del Cristo (2 Corintios 10:5).

Te recomendamos el siguiente video sobre la cirugía plástica y el cristiano.

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